Boca seca: ¿Por Qué Aparece Este Problema?
La boca seca es un problema muy común que pueden sufrir casi todas las personas en algún momento a lo largo de su vida. Esta sequedad bucal se puede producir por un cambio en la composición de la saliva o por una menor producción por parte de las glándulas salivares, que puede indicar que éstas no están funcionando correctamente.
Hay muchos factores que pueden desencadenar este problema, como la edad, la deshidratación, el estrés, la ansiedad y en otras ocasiones, su aparición puede estar relacionada con llevar malos hábitos como beber alcohol o fumar. En algunos casos, este trastorno puede aparecer como efecto secundario de tomar algunos medicamentos como antidepresivos, ansiolíticos, antihistamínicos, relajantes musculares o descongestivos. Incluso las mujeres embarazadas o que están dando el pecho a sus bebés, pueden experimentarlo debido a la deshidratación o a los cambios hormonales.
Entre las consecuencias de la presencia de este problema están la sensación de tener una boca pastosa, una saliva demasiado espesa, llagas, lengua áspera, sed constante, mal aliento, labios agrietados y la dificultad para masticar, tragar o incluso para hablar.
A pesar de la incomodidad del problema, se puede solucionar de una forma relativamente sencilla con pequeños cambios en el estilo de vida y con algunos remedios naturales, siempre y cuando los pongas en práctica de forma continuada hasta que te asegures que el problema desaparece.
Pequeños Gestos, Grandes Progresos
A veces, las mejores soluciones vienen de la mano de pequeños cambios en tu vida diaria. Por eso, aquí te muestro una serie de sencillos consejos que pueden ayudarte si consigues ponerlos en práctica:
- Bebe agua durante las comidas y mastica bien los alimentos antes de tragar, y después de comer, enjuaga tu boca con agua templada.
- Cuando hagas pequeños tentempiés, prueba con palitos de apio o de zanahoria, que contengan un alto contenido en agua para estimular la producción de saliva y mantener hidratada tu boca.
- Evita fumar o masticar tabaco, porque este impide a tu boca la producción de saliva de forma natural.
- Toma caramelos y chicles sin azúcar a lo largo del día para producir más saliva.
- Respira por la nariz y no por la boca para evitar la sequedad.
- Para mantener tu boca más hidratada durante toda la noche, procura dormir en una habitación con humidificador, o si no dispones de uno, con un recipiente con agua para que haya más humedad.
- Realiza inhalaciones de vapor de forma ocasional, ya que pueden ayudarte a despejar y mantener hidratados tus senos nasales, consiguiendo que el aire que respires llegue húmedo a tu garganta y a tu boca, previniendo la deshidratación.
- Algunas medicinas como diuréticos, antihistamínicos o descongestionantes pueden causar sequedad de boca, por lo que si puedes, evítalos.
- Para que tus glándulas produzcan más saliva, realiza gárgaras con agua templada con sal unas 3 o 4 veces al día.
- Además de cepillar y pasar el hilo dental cada vez que te laves los dientes, limpia la parte superior de tu lengua también con el cepillo.
10 Remedios Caseros para la Boca Seca
Aquí tienes los mejores remedios caseros que te pueden ayudar:
1. Aumenta el Consumo de Líquidos
Uno de los principales motivos por los que aparece este problema es la deshidratación, por lo que, lo primero que debes hacer es aumentar la cantidad de líquido que bebes para mantener tu organismo hidratado. De esta manera, a tu cuerpo le resultará más sencillo producir más saliva y te ayudará a evitar los síntomas de la boca seca.
Además de beber el agua que tu organismo necesita cada día, no dejes de tomar zumos naturales de frutas y verduras con alto contenido en agua, como los de piña, sandía y pepino.
También son buenos aliados los polos de limón o los piña, que refrescarán tu boca al instante, e incluso unos simples cubitos de hielo, que te ayudarán a incrementar la producción de saliva. El agua de coco también te puede resultar útil en este caso.
Los tés de hierbas también te ayudarán, siendo los más recomendables en este caso el té verde y la manzanilla, entre otros.
También valen los caldos ligeros y sopas, que te resultarán de gran utilidad.
Por el contrario, hay determinadas bebidas que pueden producir que tu cuerpo se deshidrate, como por ejemplo, las que contienen cafeína, como el café o los refrescos de cola, y el alcohol, que también produce ese efecto, por lo que te conviene evitarlas en la medida de lo posible.
2. Añade Pimienta Cayena a Tus Comidas
La pimienta cayena tiene la propiedad de estimular la producción de saliva, por lo que se convierte en uno de los mejores remedios para acabar con el problema de la boca seca.
Puedes añadir pimienta cayena en polvo a tus sopas, ensaladas y otros platos. También puedes aplastar una cayena con un dedo y después frotar tu lengua con él. Puede proporcionarte una sensación de quemazón durante unos segundos, pero te aseguro que el efecto que conseguirás es el de una mayor producción de saliva, consiguiendo así tu objetivo.
Otra opción es que tomes cápsulas de pimienta cayena, pero esto ya debes consultarlo con el especialista.
3. Toma Semillas de Hinojo
Las semillas de hinojo te pueden ayudar doblemente con este problema, dado que, por un lado, los flavonoides que contienen te ayudarán a aumentar tu producción de saliva, y por otro, su aromático olor te ayudará a combatir el mal aliento que suele aparecer como consecuencia de no tener la boca lo suficientemente hidratada.
Una forma de beneficiarte de esta doble propiedad, es masticando algunas semillas de hinojo varias veces al día que te ayudarán a combatir este problema.
Otra opción es mezclar la misma cantidad de semillas de hinojo y de fenogreco, tostarlas en una sartén y machacarlas después junto con un poco de sal. Tienes que tomar una media cucharadita de esta mezcla después de cada comida para mejorar este problema.
4. Cardamomo
El cardamomo se utilizaba ya desde la antigüedad para acabar con este problema, dado que simplemente masticando una semilla de cardamomo, conseguirás mantener tu boca hidratada al mismo tiempo que eliminarás el mal aliento. Puedes hacer esto después de cada comida o simplemente cuando notes que tu boca está seca.
Otra opción es añadir una cucharada de cardamomo en polvo a un vaso de agua caliente, dejarlo reposar durante 10 minutos y beberlo después. Si haces esto al menos dos veces al día, podrás mejorar el problema. Si no te gusta el sabor, puedes realizar enjuagues con esta misma infusión tibia al menos dos veces al día.
5. Aloe Vera
El áloe vera es un remedio muy antiguo que se utilizaba para mejorar este problema. Además, te ayuda a proteger los tejidos más sensibles de tu boca y mejora la función de las papilas gustativas.
Tienes varias opciones para utilizar el aloe vera para combatir este problema. La primera, sería tomar un cuarto de taza de zumo de aloe vera fresco (lo puedes encontrar en herbolarios y tiendas de dietética especializadas en productos naturales) cada día.
Otra forma de utilizarlo para este problema sería utilizar este mismo zumo de aloe para realizar enjuagues varias veces al día.
Y una tercera forma de utilizarlo para este problema sería aplicar con un bastoncillo de algodón gel puro de aloe vera en el interior de tu boca y dejarlo actuar durante unos minutos. A continuación, tendrías que enjuagarte la boca con agua templada para eliminar los restos del gel. Puedes hacer esto 2 o 3 veces al día para acabar con el problema.
6. Jengibre
El jengibre también es un eficaz remedio en este caso, dado que estimula la producción de saliva y hace que tu boca se mantenga fresca por más tiempo.
En este caso, puedes masticar lentamente un trocito pequeño de jengibre fresco un par de veces al día para combatir los síntomas de la boca seca.
También puedes prepararte una infusión de jengibre con miel y tomar unas dos o tres tazas al día para estimular la producción de saliva de tu boca.
7. Aceite de Semilla de Uva
El aceite de semilla de uva es otro gran aliado para combatir el problema de la boca seca. Como es hidratante, te ayuda a mantener la humedad que necesita tu boca durante un período razonable de tiempo, y además, gracias a su alto contenido en vitamina E, te ayudará a combatir cualquier llaga que pudiera aparecer en tu boca.
Puedes utilizar tus dedos para extender un poco de aceite de semilla de uva antes de irte a dormir sobre tu lengua y por el interior de tus mejillas, y dejarlo durante toda la noche. A la mañana siguiente, tienes que enjuagar tu boca con agua templada y después, lavar tus dientes como de costumbre. Tienes que repetir a diario para notar los efectos.
8. Limón
El zumo de limón puede ayudarte a combatir este problema de dos formas. Por un lado, te ayudará a estimular la producción de saliva, y por otro lado, te ayudará a eliminar las bacterias que pudiera haber en tu boca y refrescará tu aliento.
Puedes añadir el zumo de medio limón y un poco de miel, si quieres endulzar, en un vaso de agua y tomarlo a lo largo del día.
Otra opción es preparar tú mismo una limonada casera, pero asegúrate de no añadir azúcar para que tenga un mayor efecto.
Otra forma rápida de utilizar el limón para acabar con este problema, es poniendo un poco de sal en una rodaja de limón, y frotar con ella tu lengua para aumentar la producción de saliva.
9. Realiza Enjuagues con Aceite de Coco o Sésamo
Esta es una práctica que además de mantener tu boca hidratada, te ayudará a librarte de los gérmenes que pueda haber en ella eliminando el mal aliento que puedan causar. Puedes utilizar aceite de coco extra-virgen, aceite de sésamo o cualquier otro aceite vegetal que sea comestible.
Este remedio hay que ponerlo en práctica a diario, por la mañana y preferiblemente antes de tomar nada . Tan solo tienes que poner en tu boca 1 cucharada del aceite que hayas elegido (coco, sésamo…etc.). A continuación, tienes que enjuagarte bien la boca con el aceite, procurando que el aceite entre bien por todos los huecos interdentales, durante unos 15 o 20 minutos. Tienes que tener cuidado de no hacer gárgaras con él y no tragarlo, dado que vas a expulsar las bacterias que haya en tu boca con él. A continuación, puedes enjuagarte con agua templada o lavarte la boca de la forma habitual.
10. Corteza de Olmo
Gracias a los mucílagos que contiene la parte interna de la corteza de olmo, cuando se mezcla con agua, se consigue una sustancia gelatinosa que le proporciona hidratación a la boca e incluso a la garganta. Por eso, puede aliviar de forma efectiva muchos inconvenientes que aparecen con este problema.
Una forma de beneficiarte de esta propiedad es preparando una infusión. Para ello, tan sólo tienes que añadir 1 o 2 cucharaditas de la corteza interna del olmo en una taza de agua caliente, taparla y dejarla reposar durante 10 minutos. A continuación, puedes separar los restos de la corteza del líquido resultante, añadir miel y tomar esta infusión dos veces al día.
Otra opción es que prepares una pasta con el polvo de la corteza de olmo y agua, y lo apliques por dentro de la boca, dejándolo reposar unos minutos antes de enjuagarte con agua. Puedes hacer esto una o dos veces al día para notar los resultados.
¡Acaba con el Problema de la Boca Seca!
Como has podido ver, con un cambio de hábitos y unos cuantos remedios naturales, puedes conseguir que este problema deje de serlo de una vez por todas. Tan sólo tienes que probar y quedarte con el o los que mejor se adapten a tu problema.
Y como siempre, nos encantaría conocer tu experiencia al respecto para poder aumentar la información que te ofrecemos. ¿Quieres añadir algo más?
