¿Por Qué Aparecen los Poros Abiertos?
Los poros se encuentran en la piel y son necesarios para que esta pueda eliminar toxinas, regular la temperatura e hidratarse, entre otras funciones. Aunque hay unos unos dos millones de poros repartidos por toda la superficie del cuerpo, a los que más prestamos atención es a los del rostro, que son los que pueden dar a nuestra cara un aspecto más fresco y lozano si se encuentran cerrados, o hacer que la piel tenga mal aspecto y parezca envejecida si están dilatados o sucios por acumulación de células muertas y otras impurezas.
Hay muchos factores que influyen en su apariencia, dado que el que se vean más o menos va a depender de la genética, de la climatología, del tipo de piel que tengas, de tu edad, del nivel de estrógenos…etc. Aunque no hay una receta mágica para borrarlos de tu rostro, si puedes hacer que se vuelvan menos visibles siguiendo unos sencillos consejos y poniendo en práctica algunos remedios caseros que te ayudarán a minimizarlos, devolviendo así a tu rostro la luz y el resplandor que debería tener.
Factores que Hacen que tus Poros se Vean Abiertos
Uno de los factores que hace que tus poros se vean abiertos se debe a la forma en que tratas y cuidas tu piel. Por ejemplo, si te expones demasiado al sol y lo haces sin protección, tu piel sufrirá una pérdida de elasticidad y de colágeno que hará que los poros se agranden y resulten más visibles. Por tanto, te conviene prestar atención al sol que recibes, y aplicarte la protección que más le convenga a tu tipo de piel a diario.
Otro factor importante que determina que se vean más o menos los poros es el tipo de piel que tengas. Si tu piel es normal o seca, será menos propensa a que los poros estén dilatados. Sin embargo, si tu piel es grasa, es más probable que los poros se vean con mayor facilidad. Esto es debido a que, normalmente, la piel grasa es más gruesa, por producir una mayor cantidad de sebo, y esto hace que sea más propensa a retener impurezas y células muertas, por lo que los poros necesitan abrirse para expulsar todo. Si este es tu caso, te conviene prestar especial atención a los cuidados de tu piel para evitar que los poros se obstruyan generando otro tipo de problemas como la aparición de espinillas y acné.
La edad también influye en este caso, ya que con el paso del tiempo, la piel reduce su elasticidad, y esto hace que los poros se dilaten y se vean abiertos.
Por eso, y dependiendo de cuál sea la causa o las causas que originen este problema, te voy a contar una serie de consejos para que veas qué es lo que puedes incorporar a tu rutina diaria para mejorar el aspecto de tu piel y los remedios caseros que te pueden ayudar a acabar con el problema de los poros abiertos.
Cómo Puedes Cuidar tu Piel para Mejorar el Problema de los Poros Abiertos
Si tus poros se encuentran dilatados y son visibles a simple vista, asegúrate de seguir estos consejos a diario:
- Bebe al menos dos litros de agua al día, para mantener tu cuerpo y tu piel hidratados. De lo contrario, si tu piel se encuentra deshidratada, tus poros terminarán por abrirse para intentar ‘beber’ e hidratarse.
- Consume más vitamina C, dado que esta vitamina contiene gran cantidad de antioxidantes que evita los efectos dañinos del paso del tiempo sobre la piel.
- Utiliza protección solar a diario. La protección solar no debes utilizarla solamente en verano, dado que aunque no vayas a tomar el sol, cuando sales a la calle será inevitable que los rayos de sol incidan sobre tu rostro aunque sea invierno. Por eso, te conviene utilizar una crema con protección solar durante todo el año.
- Limpia tu cara dos veces al día: una por la mañana, para eliminar la grasa producida durante la noche, y otra vez antes de irte a dormir para evitar que las impurezas y las células muertas bloqueen los poros. Sobre todo, nunca te vayas a la cama sin desmaquillar tu rostro, dado que la piel necesita el descanso de la noche para regenerarse y recuperarse de los excesos del día, y el maquillaje puede bloquear los poros y hacer que luego se dilaten para expulsar más impurezas.
- Exfolia tu cara al menos una vez por semana. Con la exfoliación, lo que consigues es arrastrar más impurezas y alisar la superficie de la piel, con lo que minimizarás los poros y evitarás que se bloqueen.
Descubre los Mejores Remedios Caseros para Cerrar los Poros
Siempre puedes recurrir a tratamientos que existan en el mercado para atajar este problema, pero si eres constante y te gusta lo natural, puedes encontrar entre los remedios que te presento a continuación, un buen aliado para mejorar este problema.
No tienes que poner en práctica todos a la vez, no sea que vayas a resecar demasiado tu piel consiguiendo un efecto contrario a lo que buscas. Pero puedes probar y quedarte con el o los que más te gusten:
1. Mascarilla de pepino, leche y clara de huevo
Para preparar esta mascarilla necesitas triturar un pepino de tamaño mediano que esté maduro y mezclarlo junto con una cucharada de leche en polvo y una clara de huevo, hasta que consigas una pasta homogénea.
Después de limpiar tu rostro de forma habitual, tienes que aplicarte la mascarilla sobre la piel de la cara y el cuello, respetando el contorno de ojos y los labios.
Deja actuar la mascarilla durante unos 30 minutos, y aclárate con agua templada para retirar los restos de la mascarilla. Termina con agua fría para minimizar los poros y lograr un mayor efecto. A continuación, puedes aplicar tu crema hidratante habitual.
Puedes aplicarte esta mascarilla una vez por semana para notar sus efectos sobre la piel.
2. Mascarilla de almendras
Puedes hacer esta mascarilla con harina de almendra ya que te ayudará a refinar los poros de tu piel y a disminuir su apariencia. Además, puedes hacer tú misma la harina moliendo las almendras, por lo que no será un problema si no la encuentras ya hecha en el supermercado.
Solo necesitarás media taza de almendras, que deberás triturar hasta hacerlas polvo, y un poco de agua, que irás mezclando con la almendra en polvo hasta tener una pasta. A continuación, tienes que colocar la pasta sobre la piel de tu rostro limpia y dejarla actuar durante media hora. Transcurrido ese tiempo, tienes que retirar con agua tibia y ya está.
Puedes aplicarte esta mascarilla una o dos veces por semana para notar los resultados.
3. Mascarilla de avena
Esta mascarilla es muy parecida a la de almendras, pero en esta ocasión la puedes realizar con harina de avena.
Tan solo tienes que mezclar media taza de harina de avena con la misma cantidad de agua y remover bien hasta que quede una pasta homogénea. Empieza por aplicarla sobre la nariz, y continua por los pómulos, hasta que cubras el resto de tu cara, evitando el contorno de los ojos y de la boca.
Cuando se haya secado por completo, puedes retirarla con agua templada y aplicar después tu tónico habitual sobre el rostro.
4. Bicarbonato de sodio
En este caso, gracias a las propiedades antibacterianas y antiinflamatorias del bicarbonato de sodio, te ayudarán a evitar otras complicaciones como la aparición de espinillas y acné.
Para preparar este remedio, tienes que hacer una pasta con dos cucharaditas de bicarbonato y dos de agua tibia, mezclar y aplicar la pasta sobre tu rostro con movimientos circulares, insistiendo suavemente en las zonas donde los poros sean más visibles durante unos 30 segundos. A continuación, tienes que enjuagar tu rostro con agua fría para eliminar los restos de la pasta.
Con este gesto eliminarás las células muertas de la piel, la suciedad y otras impurezas que pudieran obstruir tus poros y conseguirás afinar su aspecto.
5. Mascarilla de miel, limón, manzana y yogur
Para preparar esta mascarilla tienes que rallar una manzana de tamaño mediano, y añadirle una cucharada de yogur natural, una cucharada de zumo de limón y una cucharada de miel. Mezcla bien estos ingredientes hasta que consigas una mezcla homogénea y aplícala a continuación sobre la piel del rostro limpia dejándola actuar entre 15 y 20 minutos.
Pasado este tiempo, tienes que aclarar tu rostro con agua templada para retirar los restos de la mascarilla y aplicar a continuación tu hidratante habitual. Además de minimizar el aspecto de tus poros, es estupenda para suavizar tu piel.
6. Mascarilla de clara de huevo
La clara de huevo tiene muy buenas propiedades para tonificar la piel y reducir los poros dilatados, por lo que esta mascarilla puede ser un aliado perfecto para solucionar este problema.
Tan solo tienes que batir una clara de huevo con un tenedor y ponerte una capa fina sobre la piel limpia. Deja actuar durante 20 minutos y aclarar después con agua tibia para limpiar tu piel. Puedes aplicarte esta mascarilla hasta 3 veces por semana para notar los resultados.
7. Mascarilla de yogur
Gracias al ácido láctico y los probióticos, que contienen el yogur natural, cuando se aplican sobre la piel te ayudan a reducir la apariencia del tamaño de los poros.
Para aplicarte esta mascarilla, tienes que ponerte una fina capa de yogur natural sobre la cara limpia, y dejarla reposar entre 5 y 10 minutos. Pasado este tiempo, puedes aclarar tu rostro con agua templada y termina con agua fría para potenciar el efecto sobre los poros.
Puedes utilizar esta mascarilla aproximadamente 1 vez a la semana para apreciar los resultados.
Acaba con el Problema de los Poros Abiertos de una Forma Natural
Aunque no es un problema del que preocuparse demasiado, el hecho de tener los poros abiertos hace que tu piel no se vea todo lo resplandeciente que debería, por lo que tienes que armarte de paciencia y determinación para combatirlo y acabar con este problema.
Por eso, te invitamos a que si tienes este problema, nos cuentes cuál es tu mejor arma para solucionarlo. ¡Te escuchamos!