Descubre Cómo Dejar tu Horno Impecable con Productos Naturales

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Aunque es conveniente limpiar el interior del horno después de cada uso, si dejamos postergada esta tarea y no retiramos la suciedad uso tras uso, ésta se va quedando incrustada y puede volverse difícil de retirar.

Aunque puedes encontrar productos específicos para limpiar este electrodoméstico, puedes recurrir a una alternativa más natural con vinagre y bicarbonato de sodio, que te ofrecerá resultados espectaculares. Si quieres saber cómo hacerlo, no dejes de leer esta información.

¿Limpiar el horno con productos específicos o con productos naturales?

El horno es un electrodoméstico que resulta muy útil para cocinar, pero cuya limpieza, puede traerte algún quebradero de cabeza.

Tanto si dedicas unos minutos después de utilizarlo a limpiarlo con una bayeta húmeda o estropajo y jabón, como si pospones esta tarea hasta que la suciedad esté demasiado incrustada, es probable que de vez en cuando necesites realizar una limpieza más profunda de su interior.

Para esta ocasión, puedes optar por utilizar un producto específico de los muchos que hay en el mercado, o utilizar una forma más natural con productos que probablemente ya tengas en tu casa y que resulten igualmente efectivos.

Los productos específicos para limpiar los hornos tienen a su favor que suelen ser bastante efectivos hasta con la grasa más incrustada y no necesitas de demasiado esfuerzo para retirarla una vez que los aplicas. Pero en su contra, estos productos contienen tal cantidad de químicos que requieren que utilices guantes y mascarilla porque pueden resultar incluso un poco agresivos con las vías respiratorias.

Además, para evitar que se transmitan a los alimentos, después de aclarar varias veces este producto para retirar bien los restos, requieren que enciendas el horno durante unos minutos y abras bien las ventanas para terminar de eliminar el olor que desprende, antes de volver a cocinar algo dentro de ellos.

Por eso, la ventaja de utilizar productos más naturales es que resultarán menos perjudiciales para tu salud y menos peligrosos a la hora de volver a cocinar algo dentro del horno, pero por contra, puede que requieras un poco más de esfuerzo a la hora de desincrustar los restos más difíciles de las paredes interiores o de los rincones.

Solo por evitar las posibles consecuencias de utilizar químicos demasiado agresivos, creo que merece la pena al menos probar con el método más natural.

¿Qué tengo que hacer para limpiar el horno con ingredientes naturales?

Para limpiar tu horno en profundidad sin químicos, vas a necesitar agua, vinagre blanco y bicarbonato de sodio. Con esta combinación vas a poder desprenderte de la grasa más rebelde, aunque el esfuerzo que tendrás que aplicar, será proporcional al grado de incrustación que tenga la grasa. Es decir, cuanto más sucio o más tiempo lleve la suciedad ahí pegada, más te costará quitarla, pero podrás hacerlo, te lo aseguro.

¿Qué necesito?

  • 4 cucharadas de bicarbonato de sodio.
  • 1 taza de vinagre blanco.
  • 1 taza de agua.
  • 1 botella atomizadora.
  • 1 estropajo con esponja o cepillo para la vajilla.
  • 1 bayeta.

¿Qué tengo que hacer?

Primero mezcla en la botella atomizadora la taza de agua con la taza de vinagre y remueve un poco para que se mezclen bien.

A continuación, mezcla en un cuenco el bicarbonato de sodio con un poco de agua para hacer una mezcla más o menos espesa.

Extiende bien la pasta de bicarbonato y agua por las paredes, las rejillas y la parte de abajo del horno, así como por la parte de dentro de la puerta con ayuda de la esponja, y deja actuar una media hora.

Pasada esa media hora, pulveriza bien todas las superficies donde has puesto la pasta con la mezcla de agua y vinagre. Puedes notar que al contacto con el vinagre, la pasta de bicarbonato hace un poco de espuma, pero no te preocupes, es una reacción normal que ocurre cuando juntamos una base como es el bicarbonato con un ácido como es el vinagre.

Deja actuar otra media hora para que se ablande bien la grasa.

A continuación, frota con la parte del estropajo las paredes del horno o con el cepillo para limpiar la vajilla, lo que te resulte más cómodo, para terminar de desprender toda la grasa y la suciedad que estuviera adherida.

Si necesitas insistir por alguna zona, vete pulverizando de nuevo con el agua y el vinagre para terminar de arrancar la grasa que sea difícil de eliminar.

Para terminar, puedes retirar los restos de la pasta de bicarbonato y el vinagre con una bayeta humedecida en agua.


Recuerda que lo importante es no dejar que se acumule la grasa durante demasiado tiempo, porque en caso contrario se formará una especie de costra que te resultará más difícil de eliminar., pero con este método, no hay grasa que se resista. ¡Anímate a probarlo!