¿Qué es la actitud positiva?
Seguro que muchas veces has oído o leído acerca de lo importante que es encarar las cosas que te ocurren con una actitud positiva para poder sobrellevarlas mejor, pero quizás en algunas ocasiones no has sabido cómo encontrar o hacer aflorar esta actitud positiva dentro de ti. Por eso, hoy te voy a dar unos pequeños consejos para que sepas hacer frente a las adversidades con valentía y afrontando los problemas que puedan aparecer sin caer en el desánimo.
Cada uno de nosotros tiene al menos una meta en la vida, y para alcanzarla y cumplir con tus planes, tienes que ir construyendo tu proyecto pasito a pasito, intentando desviarte lo menos posible de tu objetivo.
Ser feliz en esta vida no sólo consiste en que todo funcione correctamente a tu alrededor para que no encuentres ningún problema en tu camino, dado que en la vida, aparecen tarde o temprano distintas adversidades que pueden perturbar tu mundo y hacerte caer en el desánimo. La actitud positiva, consiste precisamente en encarar esas adversidades como algo de lo que hay que aprender para seguir adelante con tus planes al mismo tiempo que te ayudará a hacerte más fuerte. Esta misma actitud va a ayudarte a mejorar tu autoestima y tus comportamientos para que logres alcanzar el éxito en lo que te propongas.
Si hay una cosa que a veces nos cuesta mucho ver, es que lo que más nos daña no son los hechos que puedan ocurrir a nuestro alrededor, sino la forma que tenemos de interpretar esos hechos que nos han ocurrido.
Todos hemos tenido algún día en el que parece que todo sale mal desde el momento en el que pones un pie fuera de la cama. Puede deberse a que el despertador no ha sonado, el coche no ha arrancado, o has encontrado un gran atasco y has llegado dos horas tarde a donde tenías que llegar para alguna cita importante. Si encadenas dos o tres circunstancias de este tipo durante varios días y dejas que tu mente entre en un mar de pensamientos negativos y comienzas a pensar que todo te va mal, seguramente las cosas, o mejor dicho, tu percepción de las cosas no sólo no mejorará sino que empeorará por momentos, haciendo que tu vida y lo que te ocurre, no sea agradable.
Si te paras a analizar un poco las situaciones que te rodean, seguramente ninguna de ellas es tan grave como para que justifique el malestar que te haya podido producir. Sin embargo, tu reacción y la respuesta que diste a las situaciones que se te presentaron si son con casi total seguridad, las responsables de tu estado de ánimo.
Con todo ello, tienes que pensar que pase lo que pase a tu alrededor, siempre tienes que intentar ver el lado positivo de las cosas. Si decides tener una actitud positiva, no es que te niegues a reconocer que hay cosas negativas a tu alrededor, sino que renuncias a vivir con lo negativo, y este hábito te ayudará a lograr las metas que quieres conseguir en tu vida.
Tener una actitud positiva significa intentar buscar los mejores resultados en todas las situaciones, incluso de las adversas o de las peores situaciones que se nos puedan plantear en un momento dado. Cuando te empeñas en buscar cosas buenas a tu alrededor, las acabarás encontrando, y eso es algo que merece la pena analizar.
Consejos para conseguir una actitud positiva
Para conseguir tener el hábito de pensar en positivo y de forma creativa, tienes que comenzar poco a poco, tomando conciencia de lo que necesitas para adquirir esta forma de hacer frente a los inconvenientes y reforzando poco a poco tu autoestima para tener una mejor capacidad de respuesta a los problemas. Aquí van 7 pequeños consejos que te ayudarán a crear este hábito:
1. Fijate objetivos a corto plazo que sean posibles
Para comenzar a entrenar tu forma de pensar y que la actitud positiva fluya de una forma natural en tus acciones diarias, comienza por fijarte pequeños objetivos que sean posibles de alcanzar. Por ejemplo, si comes demasiada comida chatarra, comienza por proponerte que vas a comer más sano al menos tres o cuatro veces por semana. Si focalizas tu atención en prepararte los menús y pensar cómo puedes arreglártelas para comer más sano, al menos durante esos días a la semana, a medida que lo vayas consiguiendo, irás reforzando tu autoestima y viendo que es posible conseguir lo que te propones.
Igual te resulta algo difícil comenzar, pero a medida que vayas consiguiendo pequeños logros, vas a sentirte mejor contigo mismo y más estimulado. Entonces llega el momento de proponerte una meta un poco mayor, algo que te acerque más a tu objetivo y que al mismo tiempo aumente tu exigencia para conseguirlo.
Al mismo tiempo, y para reforzar este aprendizaje, tienes que buscar cuál sería la acción más importante que te ayude a lograr tu meta. Cuando la hayas encontrado y la tengas bien definida, tienes que comenzar a pensar en ella de forma positiva y focalizar tu atención en ella y así, podrás realizarla con todo el entusiasmo posible.
Eso sí, recuerda que es importante actuar y que te pongas en marcha, ya que solo si solo tienes buena voluntad o buenos pensamientos, pero no realizas acciones, difícilmente llegarás a tu meta.
2. Ten siempre presente lo bueno que tienes
Una de las formas que más te pueden ayudar a mantener una actitud positiva es agradecer todas las cosas buenas que tienes. Puedes pensar en todo lo que consideres adecuado como las personas que tienes a tu alrededor, las oportunidades que se te presentan, las experiencias que estés viviendo e incluso los bienes materiales.
Fíjate en la importancia de este punto, dado que a veces puedes correr el riesgo de concentrarte demasiado en algo que quieres cambiar y no valoras lo que ya tienes, precisamente porque lo tienes. Valorar lo que vives hoy te hará llegar mejor al día siguiente, pero sin perder la conexión con lo que ya estás viviendo.
Es positivo que tengas presente que todo lo que te ocurre durante el día, y cada día de tu vida, te ayudará a acercarte un poquito más a tu meta y al éxito, y así, podrás buscar y encontrar lo bueno en cada situación. Aunque parezca difícil en algunas situaciones, siempre hay algo bueno que recibir en cada experiencia que te ocurre en tu vida, ya sea algo que has aprendido, una experiencia que has ganado o alguien a quien has conocido. Esfuérzate por encontrar ese algo bueno, y tu actitud se tornará en una senda positiva.
3. Busca una enseñanza en todo lo que te ocurre
Al mismo tiempo que intentas buscar un lado bueno a las cosas, si buscas una enseñanza o algo de lo que puedas aprender a una circunstancia que te ocurra, entonces tomará un nuevo significado para ti.
En ese momento podrás comprender que cualquiera que sea la situación a la que te tengas que enfrentar, necesitará que la enfrentes con todas tus fuerzas para que puedas aprender la lección que estuviera contenida en esa experiencia.
Recuerda que cada enseñanza que saques por enfrentarte a tus problemas, harán que crezcas interiormente y conseguirás mejorar tu autoestima, lo que te capacitará cada vez más para lograr tus metas y objetivos.
4. Aligera tu carga emocional
Cuando estás atravesando una situación difícil que tienes que superar, al mismo tiempo que identificas lo bueno y buscas la enseñanza o lección en lo que te ocurre, es posible que encuentres cosas y personas que no te estén haciendo bien o incluso te estén dañando. Es importante que pienses por qué están en tu vida y si de verdad crees que no te están haciendo ningún bien, lo mejor será que te deshagas de ello.
Esto no es un paso sencillo, dado que quizás te veas en la situación de terminar con relaciones de años o deshacerte de cosas con las que tenías cierta afinidad, aunque no te aportaran ningún beneficio. Pero créeme cuando te digo que el beneficio a la larga de deshacerte de cosas o de relaciones que no te aportan ningún bien es tremendamente mayor que lo que creías que te pudiera estar aportando.
5. Centra tu atención en la solución
Cuando tengas que enfrentarte a un problema, tienes que centrarte rápidamente en encontrar una posible solución. No malgastes todo tu tiempo en pensar en el problema, porque entonces perderás la perspectiva de lo que tienes que hacer, que es encontrar una solución para resolver ese problema.
Si no puedes afrontar el problema con una única acción, divide tu respuesta en tareas más pequeñas que puedas ir manejando, márcate un plan con las actividades que tienes que llevar a cabo para poder resolver la situación y llévalo a cabo.
Cuando encuentres una dificultad en tu camino, se trata de orientar tu mente a buscar las posibles soluciones. Tienes que lograr crearte un hábito para buscar y encontrar las respuestas a tus preguntas y las soluciones a tus problemas. Para ello, puedes buscar la ayuda en alguna persona que tenga la madurez, la experiencia y la preparación que a ti te falta aún para lograr encontrar tu camino hacia el éxito.
6. Piensa en lo que quieres para tu futuro
Ante cualquier meta o reto que te plantees, es preciso que enfoques toda tu atención en el futuro y no en el pasado. El motivo es muy sencillo, el pasado es pasado y no lo puedes cambiar, por tanto, en lugar de preocuparte por quién hizo qué o por qué pasó una determinada situación, pasa página y centra toda tu atención en lo que quieres lograr y en la manera en que puedes llegar a ello desde el sitio donde te encuentras ahora.
Eso significa concentrarse en tu visión de futuro, pensar cómo quieres que sea y cómo quieres que se vea. Si entrenas tus pensamientos para centrarte en tu visión de futuro, conseguirás realizar acciones que serán más positivas cada día y si consigues organizar tu día a día de manera que tengas esto presente, te ayudará a lograr el hábito de tener una actitud más positiva frente a la vida.
7. Piensa como lo harían las personas de éxito
Las personas que han logrado sus metas en la vida han utilizado una actitud mental positiva como herramienta indispensable para lograr su éxito.
La cuestión es que tú también puedes conseguir esa actitud positiva si te concentras en lo bueno, buscas la enseñanza en lo que te ocurre, te enfocas en la solución del problema y piensas en el futuro como algo que está en tu mano construir.
Se trata de pensar en las situaciones utilizando tu mente para lograr el control de la situación, y así, conseguirás mantenerte positivo y con un buen espíritu la mayor parte del tiempo. Incluso recibirás la recompensa que viene con esa actitud mental positiva, como todas las personas de éxito lo han aprendido.
¡Tener una actitud positiva está en tu mano!
Puede que al principio suene un poco complicado, pero si consigues seguir estos pasos y crearte el hábito de tener una actitud positiva frente a las cosas que te pasen y frente a la vida, podrás encarar los problemas que se te presenten en tu día a día con más fuerza, lo que mejorará tu autoestima y sentarás las bases para lograr las metas que te propongas. Pero igual tú tienes algún consejo más para conseguir esta actitud que quieras compartir conmigo. ¿Me lo quieres contar?