¿Qué Es la Fibromialgia?
La fibromialgia, también conocida como fibrositis o fibromiositis, es una enfermedad crónica caracterizada por dolor generalizado. Esta dolencia es mucho más común en mujeres que en hombres.
La causa exacta de la fibromialgia aún no está clara, y básicamente se diagnostica cuando todo lo demás ha dado un resultado negativo. Los investigadores creen que puede ser el resultado de una combinación de factores estresantes físicos y emocionales.
Sus posibles causas y factores de riesgo son:
- Genética
- Alteraciones hormonales
- Traumatismos en el cerebro o la médula espinal
- Cirugías
- Enfermedades reumáticas
- Infecciones virales
- Patrón alterado del sueño
- Mal acondicionamiento físico
- Estrés
Los principales síntomas de la fibromialgia son:
- Dolor muscular debilitante
- Sensaciones de entumecimiento u hormigueo
- Sensibilidad al ruido, olores, luces brillantes, medicamentos, ciertos alimentos y frío
- Articulaciones rígidas (especialmente por la mañana)
- Fatiga
- Migrañas
- Síndrome del intestino irritable
- Trastornos de la articulación temporomandibular (TMJ)
- Trastornos del sueño
- Ansiedad
- Depresión
10 Remedios Caseros para Aliviar la Fibromialgia
La fibromialgia no es fácil de tratar, ya que no existe una cura definitiva. El objetivo principal del tratamiento es aliviar los síntomas. Será importante acudir al médico para que evalúe tu caso y decida qué tratamiento puede venirte mejor.
Además, siempre puedes complementarlo con algunos remedios naturales muy útiles como los siguientes.
1. Yoga y meditación
Las técnicas de relajación, como el yoga, el taichi, la meditación, el mindfulness y la respiración profunda, pueden ser de gran ayuda para reducir los síntomas de la fibromialgia como el dolor, la rigidez, la fatiga, el sueño deficiente, los problemas de memoria, la ansiedad, la depresión y el equilibrio deficiente.
2. Ejercicio
Realizar ejericicio habitualmente evita el desgaste muscular y restablece el equilibrio neuroquímico del cuerpo, que aumenta los niveles de endorfinas, unas sustancias químicas que combaten el dolor. También desencadena un estado emocional positivo y reduce el estrés.
Es recomendable comenzar con ejercicio leve e ir despacio para evitar que los síntomas de la fibromialgia se agraven. Por ejemplo, puedes empezar con algunas actividades regulares y de estiramiento, como subir escaleras, caminar o realizar tareas domésticas, y gradualmente pasar al ejercicio constante.
Debes tener en cuenta que aunque el dolor y la fatiga pueden dificultar el ejercicio, es imprescindible que esté físicamente activo.
3. Sal de Epsom
La fibromialgia a menudo se asocia con la deficiencia de magnesio. La sal de Epsom es sulfato de magnesio, por lo que darte un baño de sal de Epsom ayudará a tu cuerpo a absorber magnesio. Además, darte un baño relajante también puede ayudarte a reducir el dolor e inducir la relajación.
Para preprar un baño con sal de Epsom mezcla 2 tazas de sal de Epsom en una bañera de agua tibia. Relájate en ella durante unos 20 minutos. Puedes repetirlo hasta 3 veces a la semana.
4. Acupresión y acupuntura
La acupresión y la acupuntura pueden ayudarte a controlar los síntomas de la fibromialgia. Además de aliviar el dolor, estas terapias también inducen la relajación y reducen la ansiedad.
Asegúrate de contar con un acupunturista o acupresor cualificado que sepa seleccionar los puntos de acupuntura adecuados para tu tratamiento en función de tus síntomas. Éstas son técnicas delicadas que deben ser realizadas por un profesional.
Para obtener mejores resultados, combina la acupresión y la acupuntura con meditación, ejercicio, masajes y otras terapias.
5. Masajes
La terapia de masaje ayuda a relajar los músculos y a mejorar el rango de movimiento de las articulaciones. También alivia el estrés y estimula la producción de sustancias químicas que actúan como analgésicos naturales del cuerpo.
Un tipo de masaje llamado terapia manual de drenaje linfático (MLDT) también es beneficioso para la fibromialgia. Este masaje afloja los bloqueos linfáticos que podrían estar contribuyendo al dolor.
Al igual que con la acupuntura y la acupresión, será importante que estos masajes te los realice un profesional en la materia si quieres obtener los mejores resultados.
6. Ácidos Grasos Omega-3
Los ácidos grasos Omega-3 son grasas no saturadas que ayudan a disminuir la inflamación y el dolor neuropático. También pueden ayudar a controlar el dolor y la rigidez en las articulaciones.
Para incorporar los ácidos grasos omega-3 en tu dieta, come pescado azul como arenques, sardinas, anchoas, atún o salmón, 2 o 3 veces por semana. Otras fuentes de ácidos grasos omega-3 son las semillas de lino, las nueces, el aceite de colza o el aceite de soja.
También puedes consultar a tu médico, por si considera que podría ser beneficioso tomar suplementos de aceite de pescado o suplementos de omega-3. Nunca tomes suplementos sin la supervisión de tu médico o podría ser peligroso. Por ejemplo, el aceite de pescado o los suplementos de omega-3 pueden interferir con los medicamentos anticoagulantes.
7. Vinagre de Sidra de Manzana
El vinagre de sidra de manzana ayuda a equilibrar los niveles de pH del cuerpo, reducir el estrés oxidativo y mejorar la circulación. Esto puede ayudar a reducir los síntomas de la fibromialgia, como problemas gastrointestinales, fatiga, dolores de cabeza, dolor en las articulaciones, hinchazón e inflamación.
Agregua 1 o 2 cucharadas de vinagre de sidra de manzana en un vaso de agua tibia, y bébelo 2 veces al día. Puedes agregar un poco de miel si lo prefieres, para mejorar su sabor.
8. Cúrcuma
Gracias a sus poderosas propiedades antiinflamatorias, la cúrcuma puede ayudar a tratar muchos síntomas de la fibromialgia. Contiene un compuesto llamado curcumina que también ayuda a aliviar el dolor y la rigidez.
Mezcla 1 cucharadita de cúrcuma en polvo en 1 taza de leche. Caliéntala hasta que hierva y luego déjala enfriar. Toma este remedio una o dos veces al día.
Además, también puedes incluir cúrcuma en tu cocina, a modo de especia.
9. Jengibre
El jengibre también tiene propiedades antiinflamatorias y analgésicas que ayudan a reducir los síntomas de la fibromialgia.
Agrega 1 cucharadita de jengibre recién rallado a una taza de agua hirviendo. Déjalo cocer a fuego lento durante aproximadamente 10 minutos. Cuela y bebe este té hasta 3 veces al día.
10. Pimienta de Cayena
La pimienta de cayena contiene un compuesto llamado capsaicina que actúa como un analgésico natural. También es muy beneficioso para la circulación sanguínea.
Puedes incluir pimienta de cayena en tu cocina diaria a modo de especia. Además, también existen suplementos que pueden ayudarte, pero siempre consulta a tu médico antes de tomarlos.
Por otra parte, también puedes aplicar una pequeña cantidad de crema de capsaicina en las áreas doloridas y dejarla actuar durante aproximadamente 30 minutos. Repite el proceso hasta 3 veces al día. Eso sí, será importante que no apliques pimienta de cayena o crema de capsaicina en la piel herida o inflamada, o podría empeorar.
Otros Consejos para Aliviar los Síntomas de la Fibromialgia
- Establece una rutina de sueño regular y duerme lo suficiente.
- Lleva una dieta sana y equilibrada.
- Prueba una dieta de eliminación para evaluar tu sensibilidad a los alimentos y así eliminar los posibles alérgenos alimentarios de tu dieta.
- Evita la cafeína, ya que puede alterar tu patrón de sueño y exacerbar los síntomas de ansiedad e inquietud.
- Consulta a tu médico para que te recomiende suplementos de magnesio, de 5-HTP, de SAM-e o de L-carnitina si lo considera necesario.
