¿Qué es el Herpes Labial y Cómo nos Afecta?
El herpes labial, también conocido como «fuego», es la manifestación del contagio por el virus herpes. Este virus se transmite por contacto, ya sea por contacto directo con alguien que tenga una infección activa (por ejemplo a través de un beso), como por contacto con elementos contaminados, como pueden ser cuchillas de afeitar, toallas, cubiertos o cosméticos.
Casi todo el mundo adulto ha sufrido alguna vez la infección de este virus. Lo que mucha gente no sabe es que cuando te contagias de herpes este virus se queda en tu organismo para siempre. Sin embargo, no siempre se manifiesta.
Hay factores que pueden favorecer la aparición de una nueva infección, como por ejemplo el estrés, el debilitamiento de tu sistema inmunológico por parte de alguna enfermedad, la fiebre, las quemaduras solares o las alergias.
12 Remedios Naturales que Eliminarán tu Herpes Labial por Completo
La infección por herpes pasa por cinco fases diferentes: hormigueo, ampolla, drenaje, formación de costra y curación. Pese a que lo ideal es actuar rápido y detener la infección en su primera fase, en ocasiones será inevitable la formación de la ampolla.
Afortunadamente, si esto sucede tenemos diversos remedios naturales que nos pueden ayudar a reducir sus síntomas y a eliminarla rápidamente:
Ajo: El ajo contiene propiedades antivirales y antibióticas, lo que será ideal para combatir el herpes. Deberemos partir un diente de ajo fresco por la mitad, y frotarlo directamente sobre la ampolla durante unos segundos.
Hielo: El hielo puede ayudarte a eliminar el herpes antes de que salga la ampolla. En cuanto notes un ligero cosquilleo en tu labio, aplícalo sobre la zona envuelto en una toalla o trapo, y mantenlo durante unos minutos.
Nunca apliques el hielo directamente sobre la zona, sin protección, ya que podría dañar tu piel. También es recomendable no usar hielo si la ampolla ya está abierta. En ese caso, será más efectivo usar calor para que sane más rápido.
Leche: La leche contiene un aminoácido llamado lisina, que ayuda a combatir al herpes labial, ya que inhibe a otro aminoácido llamado arginina, que favorece el brote del herpes. Para aplicarla, solo tendrás que humedecer un algodón con leche y frotarlo sobre la ampolla.
También será muy efectiva si la usas antes de que salga la ampolla, en cuanto notes ese hormigueo o escozor inicial. Gracias a eso podrías evitar que la ampolla salga.
Yogur: El yogur, al igual que la leche, también contiene lisina, por lo que te ayudará a sanar rápidamente la ampolla del herpes. Aplica un poco de yogur natural sobre la zona afectada, y déjala actuar unos minutos para que haga efecto.
Té negro: El té negro será muy efectivo cuando la ampolla ya haya salido. Hierve un vaso de agua y coloca una bolsita de té negro dentro. Déjala que se empape bien mientras se enfría un poco, y después colócala sobre la zona afectada, frotándola durante unos minutos.
Esto no sólo te calmará el dolor, sino que hará que la ampolla sane mucho más rápido.
Tomate y aloe vera: Cuando te aparezca un brote de herpes labial, debes asegurarte de limpiarlo bien diariamente. Una manera efectiva de limpiarlo, y que además te aliviará el dolor, es frotar pulpa de tomate sobre la zona. Después déjala actuar durante unos minutos, retírala y aplica un poco de aloe vera sobre la zona.
Esto no solo hidratará esa zona de tu piel, que en ese momento estará muy sensible, sino que además te ayudará a secar más rápidamente el brote de herpes.
Tomate verde con bicarbonato de sodio: El tomate verde con bicarbonato de sodio también será muy efectivo para eliminar rápidamente el herpes labial. Mezcla la pulpa del tomate verde con bicarbonato de sodio hasta hacer una pasta, y aplícalo sobre la zona afectada con un bastoncillo de algodón. Déjala actuar unos minutos, y repite el proceso un par de veces al día.
Limón: Gracias a las propiedades desinfectantes y antisépticas del limón, podrás combatir eficazmente la infección del herpes labial. Tan solo tendrás que aplicar unas gotas de limón sobre la ampolla, 3 veces al día.
Hamamelis: El hamamelis nos ayudará secar más rápidamente la llaga o ampolla. Empapa un algodón en infusión de hamamelis y frótalo sobre la zona durante unos segundos.
Será recomendable repetir el proceso varias veces al día, para acelerar el secado de la ampolla.
Violeta de genciana: La violeta de genciana es un antiséptico natural muy efectivo, por lo que nos ayudará a eliminar la ampolla rápidamente.
Aplícala con un bastoncillo de algodón sobre la zona, y repite el proceso dos veces al día, durante varios días hasta que la ampolla se haya secado por completo.
Miel y vinagre: Tanto la miel como el vinagre tienen propiedades antibióticas que pueden ayudarnos a combatir el herpes labial.
Simplemente tendrás que mezclar una cucharada de miel con un poco de vinagre, y aplicarlo con un algodón sobre la ampolla. Se recomienda repetir el proceso 3 veces al día.
Sal: La sal puede ayudarte rápidamente a deshidratar y eliminar las llagas producidas por el herpes labial. Para aplicarla, es recomendable machacarla con una cuchara para dejarla lo más fina posible.
Después humedeceremos un algodón con agua para que toda la sal se quede pegada a él, y lo aplicaremos directamente sobre la ampolla, dejándolo actuar durante unos minutos. Es recomendable repetir este proceso 3 veces al día para que cicatrice rápidamente.
12 Recomendaciones para Eliminar el Herpes Labial y Evitar Nuevos Contagios
Además de tratar el herpes labial de manera natural, también será importante tener en cuenta diversos factores de higiene y seguridad, no sólo para impedir que el herpes nos infecte o para eliminarlo lo más rápidamente posible, sino para evitar que otra gente se contagie u otras partes de nuestro cuerpo se infecten también.
Será importante limpiar muy bien la zona afectada con agua y jabón, antes de utilizar cualquier remedio natural contra el herpes. Además, se recomienda secar bien la zona después de limpiarla, ya que si se queda húmeda el proceso de cicatrización podría alargarse.
No maquilles las ampollas o llagas del herpes, ya que ralentizarás su proceso de secado. En lugar de eso, protégela con una capa de vaselina para alejarla de las bacterias.
Evita la exposición al sol, o usa protector solar si no puedes evitarlo, sobre todo si es verano.
Nunca revientes la ampolla ni retires la piel muerta de su alrededor, aun cuando parezca que ya está bastante reseca.
Si todavía no se ha caído sola es porque no ha sanado del todo, y arrancarla podría hacer que volviera a abrirse.
Deshecha todos los objetos que hayan podido estar en contacto con tu herpes, para evitar un posible contagio.
Los objetos más comunes pueden ser cepillos de dientes (y también la pasta, ya que entra en contacto con el cepillo), cuchillas de afeitar, o cosméticos, sobre todo lápices de labios.
Por el mismo motivo, limpia a conciencia todos los objetos que hayan estado en contacto con el herpes, como cubiertos, toallas, vasos, etc.
También será importante no tocarte el brote y lavarte las manos con frecuencia, para no propagarlo a otros objetos o personas.
Asimismo, procura no tener contacto directo con otras personas, o podrías contagiarlas. Así que evita los besos hasta que el herpes esté completamente curado.
Consume alimentos ricos en lisina, un aminoácido que ya te comentábamos que ayuda a combatir el herpes.
Entre ellos podemos encontrar la leche y sus derivados, el pescado, la carne o las legumbres.
De igual manera, hay alimentos que ayudarán al herpes a crecer, por lo que deberemos evitarlos a toda costa.
Son los alimentos que contienen el aminoácido llamado arginina, como pueden ser el chocolate, los frutos secos, los guisantes, la gelatina, los refrescos de cola o la cerveza.
También será importante mantenerse relajado, ya que una de las causas que pueden desencadenar un brote de herpes es el estrés.
Ejercicios como la meditación o el yoga pueden ayudarte a liberar tu mente de tensiones.
Realizar ejercicio diario te ayuda a fortalecer tu sistema inmunológico, y eso también te ayudará a combatir el herpes.
Como ya hemos dicho antes, el virus del herpes vive siempre con nosotros desde el primer contagio, pero si mantenemos nuestro cuerpo en forma podremos evitar que el virus nos ataque.
De la misma manera, deberemos evitar acciones que debiliten nuestro sistema inmunológico, como por ejemplo fumar o tomar alcohol.
Mantén tu Herpes a Raya
Si te ha interesado este artículo, pero te gustaría profundizar más sobre este tema, y sobre muchos otros, puedes encontrar todos nuestros remedios recogidos en el libro «365 Remedios Caseros«.
Ya sabes que desgraciadamente no podemos eliminar el virus del herpes de nuestro organismo, pero gracias a estos consejos y remedios hemos aprendido a mantenerlo a raya para que no vuelva a molestarnos nunca más.
¿Tienes algún remedio más que quieras compartir con nosotros? ¡Estaremos encantados de leerte!