Hay Síntomas Que Una Mujer No Debe Ignorar
Cada vez las mujeres intentamos compaginar de la mejor de las maneras nuestra vida familiar con nuestra vida laboral. Las responsabilidades que tenemos aumentan, y ante esta situación puede que en ciertas ocasiones, con el afán de querer llevarlo todo a la orden del día descuidemos nuestra salud.
Lo que podemos considerar como un simple dolor de cabeza puede estar alertándonos de algo más grave que se esconde detrás, y esto es solo un ejemplo de los síntomas que pueden estar avisándonos de que algo no va como debería.
Con el fin de ayudarte a estar alerta ante síntomas que pueden desarrollar problemas más graves de salud, aquí te indicamos ante qué 10 síntomas debes permanecer especialmente atenta. Vamos a verlos.
1. Cansancio Constante y Fatiga
Tras realizar todas las tareas que puedas tener en cuanto a responsabilidades tanto familiares como laborales (como cuidar de los niños, presentar un informe, limpiar la casa o ir a comprar, por ejemplo), es normal que te sientas cansada. Pero si tras un merecido descanso no recuperas tu energía, puede que estés ante un caso de síndrome de fatiga crónica.
La fatiga es más común en las mujeres que en los hombres. Estar constantemente cansada también puede derivarse en problemas de salud como la depresión, una insuficiencia hepática, anemia, cáncer, insuficiencia renal, enfermedades cardiovascular, tiroides, apnea del sueño o diabetes.
Que sufras fatiga de forma continua no implica que padezcas estos problemas de salud o enfermedades, pero con el fin de descartarlas, es recomendable que acudas al médico para determinar la causa de tu cansancio.
2. Aparición de Nuevos Lunares
Tener lunares en nuestra piel es habitual, tanto en hombres como en mujeres. Podemos tenerlos en cualquier parte del cuerpo, pero las mujeres deberán estar especialmente atentas cuando éstos sufran algún cambio, ya que pueden estar asociados con el melanoma.
Cuantos más lunares tengamos más riesgo de padecerlo tenemos. Mantente alerta si compruebas que tus lunares tienen una forma asimétrica, cuentan con bordes irregulares, si han cambiado su color o han cambiado su diámetro, o si con el tiempo han ido haciéndose más grande o han sangrado.
No intentes quitártelos ni rascarlos. Acude a un especialista para que evalúe tu lunar y descarte cualquier riesgo de melanoma.
3. Bultos en los Senos
El cáncer de mama es el tumor más frecuente en las mujeres. Sus síntomas pueden ser variados, pero uno de los más comunes es el de la aparición de bultos o protuberancias en uno de los senos, o incluso en ambos. También se puede detectar una hinchazón o enrojecimiento en ellos.
Pueden serlo, pero no tienen por qué ser dolorosos para avisarnos de un posible cáncer o tumor en el pecho, por lo que ante cualquier bulto que notemos es conveniente acudir al médico.
Como medida de prevención, es altamente recomendable que las mujeres mayores de 40 años, se realicen una mamografía cada 1 o 2 años para poder detectar posibles signos de cáncer de mama temprano y poder combatirlos.
4. Dolor o Molestias en el Pecho
Sentir dolor o malestar en el pecho es otro de los síntomas ante el que las mujeres deben mantenerse alerta, pues éste dolor puede estar avisándonos de una posible enfermedad de corazón.
En muchas ocasiones no le otorgamos la suficiente importancia, y creemos que puede deberse a dolencias menos graves como acidez o indigestión. Esto provoca que cuando acudamos al médico, el diagnostico sea tardío y la enfermedad cardíaca esté más desarrollada.
Una vez pasada a menopausia, los ovarios dejan de producir estrógeno, que es la hormona que ayuda a mantener los niveles adecuados de colesterol “bueno” en nuestro cuerpo. Al dejar de producirse, las mujeres se vuelven más vulnerables ante la aparición de enfermedades del corazón.
Si además de dolor en el pecho sufres síntomas como debilidad, sofocos, falta de aliento, sudor frío o dolor en el brazo u hombro izquierdo, consulta a tu médico lo antes posible.
5. Fuertes Dolores de Cabeza o Migrañas
Los dolores de cabeza se dan de forma más frecuente entre las mujeres que entre los hombres, y es habitual que se produzcan cuando hemos tenido un día estresante. Pero padecer dolores de cabeza repentinos y persistentes puede estar indicándonos un problema de salud más grave.
Desde un derrame cerebral, hasta presión arterial alta, ataques al corazón o coágulos en la sangre, son algunos de los efectos que puede desencadenar un dolor de cabeza constante. Si sufres estos dolores de forma habitual no dudes en acudir a tu médico para que te examine.
6. Sangrado Vaginal Después de la Menopausia
También tras la menopausia debemos estar alerta ante cualquier tipo de sangrado vaginal, ya que puede tratarse de algo inofensivo, pero también puede ser un síntoma de cáncer de endometrio, cáncer de cuello de útero o cáncer de la vagina.
Otras causas que pueden provocar el sangrado vaginal son fibromas y pólipos uterinos, infección de la mucosa uterina, traumatismo pélvico o hiperplasia endometrial.
Ante esto, cuanto antes nos examine un especialista, antes podrá descubrir la causa del sangrado y actuar con el tratamiento oportuno.
7. Relaciones Sexuales Dolorosas
Las relaciones sexuales dolorosas son uno de los dolores más comunes entre las mujeres, y que la mayoría ha padecido en algún momento de su vida. Detrás de ellos puede haber causas como la menopausia, ya que tras pasarla, el revestimiento de la vagina pierde su humedad normal, y al haber sequedad ésta puede provocar dolor durante el coito.
También tras el parto podemos sufrir dolores, y otras causas pueden ser los quistes ováricos, las infecciones de útero o de las trompas de Falopio, la endometriosis o los fibromas.
Si el dolor no es puntual sino que se convierte en algo habitual, acude a tu ginecólogo para averiguar la causa de ese dolor y poder combatirlo.
8. Variaciones de Peso Sin Sentido
No pienses que porque tu peso varíe dos kilos entre un día y otro debes preocuparte. No hay que alarmarse ya que esto es algo normal, pues dependiendo de la hora a la que nos pesemos, el agua que hayamos bebido o incluso de lo que hayamos comido ese día, nuestro peso puede ser diferente de un día a otro.
El problema surge cuando esa diferencia es notable, de unos 5kg aproximadamente, y se ha producido sin introducir cambios en nuestra dieta para que sea variada y equilibrada, ni tampoco porque hemos empezado a ejercitarnos y practicar algún deporte.
Este cambio repentino de peso puede estar indicándonos un posible cáncer (de páncreas, estómago, esófago o pulmones), una enfermedad celíaca, la diabetes, enfermedades del corazón, tiroides, depresión, estrés, problemas digestivos, deficiencias nutricionales o retención de líquidos.
Para quedarte tranquila y prevenir, acude a tu médico para determinar cuál es la causa de esa variación de peso tan evidente.
9. Piernas Hinchadas
Cuando las mujeres están embarazadas es común la acumulación de líquido y por la tanto la hinchazón de las piernas. Pero existen otras causas por las que nuestras piernas pueden estar hinchadas, como un edema periférico, una enfermedad renal crónica, la cirriosis, una trombosis venosa profunda, la ruptura del tendón de Aquiles, la bursitis de rodilla, la osteoartritis, la artritis reumatoide o un esguince de tobillo.
Si sufres hinchazón de piernas sin ninguna causa aparente, consulta con tu médico para descartar posibles problemas de salud.
10. Dolor de Abdomen, Gases o Hinchazón
Tener molestias de forma habitual en el abdomen, sentirse hinchada y con gases casi todos los días, puede ser un motivo de preocupación para tu salud.
El dolor abdominal puede ser un síntoma de cáncer de ovario, así como los gases y la hinchazón pueden estar alertándonos de una enfermedad celíaca, el síndrome del intestino irritable o divertículis. También el dolor abdominal pude indicar una apendicitis, úlcera de estómago o un problema en la vesícula biliar.
Ante los frecuentes dolores abdominales, hinchazón, gases, y diarrea o estreñimiento que dure más de un par de semanas, es recomendable que acudas al médico para descartar posibles enfermedades.
¡Cuidar de Tu Salud Es importante!
Como has comprobado, lo que podemos considerar como un simple síntoma puede ser la alarma que nos avise de que algo no va del todo bien, por lo que es importante que te mantengas alerta, y ante cualquier dolor o malestar que padezcas de los que te hemos indicado, acudas al médico para asegurarte de que tu salud no corre peligro.
Cuanto antes acudamos, antes podremos averiguar la causa de nuestra dolencia y actuar con el tratamiento adecuado para combatirla. ¡No descuides tu salud!